Pues no hay muchas opciones para lucir menos narizón, sino es que más bien son mínimas. La cirugía platica (rinoplastia) sería lo más efectivo, fuera de ello, no se puede hacer mucho, más que combinar un buen peinado, un poco de maquillaje o evitar dar el perfil cuando platique.
Aunque para ser sinceros, a pesar de los “defectos” siempre habrá, la “otra mitad de la naranja”. La clave es NO acomplejarse.
Es bien sabido, que la verdadera belleza es aquella que emana del interior, aquella donde se expresa sinceridad, respeto, amor y buenos valores hacia la otra persona. Teniendo esto, el plano físico pasa a segundo lugar.
A pesar de como sea físicamente quiérase y respétese. Una vez más lo volvemos a decir, NO se acompleje, en especial si su nariz no es la más atractiva. Aprenda a aceptarse como es y mejor cultive buenas actitudes y cualidades, verá como con ello le rendirá buenos resultados.
Si alguien bromea (o se burla) sobre la forma de su nariz, no se enoje y mejor ríase también, verá, que al notar que no le disgusta, ya no le volverán a estar moleste y moleste, por que sabrán no le disgusta. Por el contario, si se enoja, más le molestaran, precisamente por eso, para hacerlo enojar. Recuerde que “el que se enoja pierde”.
Todos tenemos algún “defecto físico” y no por ello se acaba la vida. Algunos somos morenos, chaparros, orejones, gordos, muy flacos, calvos, con ojos pequeños, con frente amplia, cachetones, con exceso de lunares, con acné… en fin, la lista es larga. Y a pesar de todo ello, podemos ser felices y pasárnosla bien.
Así que, no se traume con lo de su nariz y disfrute de la vida.