Imagínate una tina llena con agua fragante y tibia, donde flotan burbujas tornasoladas y pequeñas bolas perfumadas que se disuelven poco a poco. Te desnudas despacio, quitándote junto con la ropa todas las presiones del día, y te introduces poco a poco en la tina, sintiendo como el agua acaricia tu piel, como se relajan tus músculos, como te invade una deliciosa sensación de relax.

Baño para relajarse y quitarse el estrés:

No, no es un sueño. Es algo que puedes hacer cuando tú quieras, y que de hecho deberías hacer como una costumbre.

• El agua es el elemento fundamental de la vida. Simboliza la fluidez, la fuerza, la claridad. Desde siempre, hemos utilizado los baños como recurso esotérico de purificación y de captación de energía, y como un poderoso aliado terapéutico contra dolores musculares, estrés, problemas en la piel... e incluso como afrodisiaco.

• Todos sabemos de la maravillosa sensación de tomar una ducha o un baño de tina con agua tibia y perfumada después de un día tenso y agitado. Los músculos se relajan, la piel se hidrata, el espíritu descansa y el mundo vuelve a estar bien.

• La ducha de la mañana nos despierta para comenzar el día, pero un baño tibio por la noche es la preparación ideal para el descanso. Es poner cuerpo, mente y espíritu en el estado exacto para entregarnos a un sueño verdaderamente reparador.

No hay pretextos:

• ¿Qué no tienes tiempo? Eso es solo un pretexto. ¿Qué no tienes tina? Sustitúyela por una ducha tibia y prolongada, enjabonando tu cuerpo con un champú corporal que dejará tu piel tersa y tú animo tranquilo. Dime: o ¿no es verdad que te lo mereces?