El peeling o exfoliación elimina las células muertas de la superficie de la piel y permite que ésta respire y se vuelva más suave y receptiva a los productos que te vayas a aplicar a continuación.
Cómo hacer una exfoliación o peeling casero:

• En casa, puedes hacerte un exfoliante de avena mezclando 2 cucharaditas de harina de avena con 2 cucharaditas de almendras trituradas y agua de hamamelis (para pieles grasas) o agua de rosas (para pieles secas).
• Deja reposar 5 minutos y aplícate la mezcla sobre la cara con ligeros movimientos rotatorios.
• Evita el contorno de los ojos.
• Enjuágate con agua tibia y sécate a golpecitos con una toalla.
• Puedes hacerlo cada 7 ó 10 días.